Ejemplos de Lenguaje Coloquial
El lenguaje coloquial es aquel que se utiliza en las conversaciones comunes, independientemente de la profesión, edad o nivel de estudios de las personas involucradas. Así, el lenguaje coloquial es el que se utiliza en la vida cotidiana de todas las personas, y puede utilizarse o no en las obras escritas.
La palabra coloquial viene de “coloquio”, que significa conversación. Por lo cual, al hablar de lenguaje coloquial se está haciendo referencia a las conversaciones que la gente lleva a cabo con regularidad.
Características del lenguaje coloquial
Una de las características más importantes del lenguaje coloquial es la improvisación. El utilizar este tipo de lenguaje en la vida cotidiana de todas las personas, lleva a repeticiones continuas de palabras, a utilizar un código poco elaborado y nada formal. Esto hace que este tipo de lenguaje parezca inapropiado, sobre todo cuando se está en un contexto más formal y/o técnico.
En segundo lugar, destaca la imprecisión. En el lenguaje coloquial predomina el uso de palabras poco precisas, y del poco uso de adjetivos y adverbios. En una conversación coloquial, predomina la función expresiva del lenguaje principalmente afectivo. Destaca la utilización de expresiones exclamativas e interrogativas, así como de los diminutivos y los sufijos aumentativos (chiquito, grandote, etcétera). Dentro de una conversación coloquial, se dan frecuentemente los cambios de tema abruptos y los razonamientos inacabados.
En tercer lugar hay que destacar el contacto con el emisor. Esta es una característica importante puesto que el lenguaje coloquial se apoya mucho del lenguaje no verbal, es decir, de los códigos extratextuales, entre los que destacan la expresión corporal y los gestos.
Por último, destaca la oralidad. Al tratarse de un tipo de lenguaje más bien relajado, carece de muchas de las normas lingüísticas, por lo que no es común encontrarlo en las obras escritas.
100 ejemplos de oraciones con lenguaje coloquial:
- ¡El partido de hoy estuvo buenísimo!
- No quiero tener broncas con nadie.
- Los niños están corre y corre por todos lados.
- A lo mejor vamos a casa de Juan mañana.
- ¡Hola!, ¿qué tal va todo?
- Me gustan más las mujeres chaparritas que las altotas.
- Nos vemos en la casa de mis hermanos para la pachanga.
- Arturo no me dijo la verdad, me dijo que no ibas a venir.
- ¡Está riquísimo el pastel de chocolate!
- No tengo nadita de ganas de salir a la calle.
- Laura quiere desayunar unos huevitos.
- ¿Y si vamos a la fiesta de María?
- Los niños jugaron hasta hartarse.
- Hola, ¿dónde andabas?
- Ahí nos vemos luego.
- Tengo mucha flojera de hablar de ese tema.
- La fiesta estuvo de lujo.
- La verdad es que sí te pasaste.
- Ven tantito y ayúdame con esta cosa.
- La salsita roja está picosa, las otras no.
- La comida que hizo tu mamá está súper rica.
- Necesito que me digas la puritita verdad.
- Las llantas de mi carro son muy aguantadoras.
- Los perros de la vecina de al lado se la pasan ladre y ladre.
- Los gatitos son las mejores mascotas de todas.
- Los zancudos me han estado pique y pique todo el día.
- Quiero comerme un elote con mucho chile.
- El señor de la panadería es muy gritón y grosero.
- Mi hermano me tosió en la cara y me contagió la gripa.
- Claudia se la pasa hablando por teléfono toda la tarde.
- Ramiro fue a la playa en el verano y se quemó un montón.
- Mi amiga Isela tiene la piel súper blanquísima.
- La mochila que estás cargando está pesadísima.
- ¿Por qué nunca contestas el celular?
- Tenemos que darle a esto toda la tarde si queremos terminar a tiempo.
- No quiero comer pastel de chocolate porque me voy a poner muy gordo.
- Todavía no he visto los mensajes que me mandaste ayer.
- Podría comer estas galletas todo el día todos los días.
- Tus chistes siempre me hacen reír un montón.
- Ya me queda muy poquito tiempo para terminar el trabajo.
- Juanito es un niño muy traviesito y mal portado.
- La ropa que me compraste está súper bonita.
- Ya no falta nada para mi cumpleaños.
- Laura está juntando dinero para poder comprarse el vestido que quiere.
- Octavio todos los días anda en moto.
- Tengo un montón de hambre desde hace rato.
- Esa niña está muy chiquita y güerita.
- Todos los pecesitos que compraste el otro día, se murieron.
- Quiero salir a dar la vuelta con todos mis amigos.
- Mariana no ha tenido ganas de levantarse en todo el día.
- Hace un chorro de calor aquí, mejor hay que salirnos.
- Mi mamá ha tenido un montón de problemas con el banco últimamente.
- Esta naranja está súper dulce y tiene mucho jugo, muy rica.
- Todavía no completo el dinero para comprar lo que necesito.
- Me voy a quedar a trabajar aquí otro ratito.
- Tengo muchísima tarea para mañana.
- No pude dormir en toda la noche nomás piense y piense en lo que pasó.
- Ese elefante tiene un panzota muy grande.
- Los mangos del árbol de mi abuela están súper ácidos.
- No he tenido chance de revisar lo que me dijiste.
- Ya ahorita en un ratito voy para allá.
- No creo que tenga tiempo hoy, la verdad.
- A Daniel le duele mucho la panza.
- Se fue la luz en toda la colonia.
- Yo me tuve que aventar solo todo el trabajo que era para mañana.
- ¡Ahorita nos vemos!
- No le di ni chance de hablar, estuve hablando yo todo el tiempo.
- Me duele un montón la cabeza, no sé por qué.
- Ya casi termino todo lo que te había dicho, dame dos segundos.
- Esta blusa es súper caliente.
- Ya mero llegamos a tu casa.
- Aguántame tantito más, ya no me tardo.
- ¡Te quedaste con todas las mejores opciones!
- No tengo ni tantitas ganas de levantarme.
- Me voy a tirar a la alberca yo primero.
- Quiero helado, dame tantito.
- Juanito está comiendo nieve de chocolate y no le quiere dar a nadie.
- Mis hijos quieren ir a la tienda a comprar un montón de cosas.
- Mucha gente me ha preguntado por ti últimamente.
- Ya se nos hizo muy noche, tenemos que apurarnos.
- Los animalitos que tienes en tu casa son muy cochinos.
- Ya me queda nomás tantito tiempo para hacer esto.
- Tengo un montón de sueño, ya me voy a dormir.
- Me estoy muriendo del dolor de cabeza.
- La comida de hoy me quedó para chuparse los dedos.
- El examen estuvo regalado.
- La cena le cayó pesada y le dio mucho asco.
- Ya merito termino todo y voy para allá.
- Hoy me toca otra vez trabajar todo el día.
- La nieve de limón que compré en la tiendita estaba muy mala.
- Bueno pues, así quedamos entonces.
- Nunca entendí lo que me estabas diciendo.
- Mi hija adolescente es muy contestona.
- ¿Te gustó la chamarra que te compré?
- Ya todos comieron, nadie se quedó con hambre.
- Esta blusa es la más carita de todas.
- Me gusta ir a esa tienda porque encuentro todo baratísimo.
- Los niños chiquitos que están ahí son muy groseros.
- ¿Cómo ves, sí le entras o no?
- Ramiro vino todo enojado y empezó a gritar un montón de cosas.
Un artículo sobre lenguaje coloquial que te pueden interesar:
¿Cómo citar? & Del Moral, M. (s.f.). Ejemplos de Lenguaje Coloquial.Ejemplo de. Recuperado el 13 de Junio de 2024 de https://www.ejemplode.com/12-clases_de_espanol/4357-ejemplo_de_lenguaje_coloquial.html
Últimos 10 comentarios