Aceite De Oliva ¿es Tan Graso Como Dicen?

Hay muchos tipos de aceites en el mercado y hay que saber que algunos son aptos para utilizar solamente como aliños, es decir, crudos.

Entre todos los aceites hay sabores de todo tipo: de avellana, de nuez, germen de trigo, soja, colza, oliva, girasol… 

Muchos dicen que el aceite de oliva no está muy indicado para mantener la línea, así que se restringe bastante o totalmente cuando se hace dieta. Es importante saber si es cierto.

El aceite de oliva engorda prácticamente lo mismo que cualquier otro tipo de aceite, siempre y cuando se sobrepase su consumo. Es decir, que tomar aceite de oliva en su justa medida no tiene porque ser más grasiento ni contener más calorías.

El aporte calórico: como cualquier tipo de aceite aproximadamente es de 900 calorías por cada 100 gramos. Se transforma en 90 calorías, que es lo mismo a una cucharada sopera.

El aceite de oliva es muy rico en grasas monoinsaturados ¿qué quiere decir eso? Significa que el ácido oleico. Esto significa para que se entienda, que el aceite de oliva ayuda a reducir el colesterol malo en la sangre. Siempre hablando de las cantidades justas y sin fritos. Ayuda a reducir el colesterol malo y aumenta el bueno el que conocen los nutricionistas como “Hdl”.

Se cree erróneamente que el más idóneo para las dietas es de girasol pero no es así, muchos nutricionistas aconsejan cuando se está intentando mantener la línea, consumir otro aceite, como el de parafina. Pero como contrapunto está que ese aceite no es natural… proviene del petróleo, así que son muchos los que se niegan a tomarlo. Hay muchos aceites en el mercado y siempre que sean con moderación, no tiene porque ser malo. Pero ya va a gustos… desde luego en la dieta mediterránea no puede faltar un buen aceite de oliva.